viernes, 14 de octubre de 2022

Danzas Paganas. (Reto de Halloween de Tiffany)

                                 
La foto es de  pinterest

Siguiendo la estela del blog de mi amiga Tiffany  me he sumado a su convocatoria de hacer un poema de terror todos los Viernes de este mes de octubre, pues bien, aquí está mi pequeño aporte que en verdad es una especie entre Híbrido de poema/relato corto de terror.
Espero que mi amiga Tiffany pueda perdonarme, mis musas hoy no estaban por la labor.
En caso de que no le gustase, no hay problema, este sería el especial de Halloween de este año.
Ya que no sé si Terremoto Crazy, el Justiniano, las dos hermanas Greta y Graciela, junto con el jardinero loco, querrán hacer un extra de Halloween para todos nosotros.

Si queréis leer más poemas de terror pinchad en el nombre de la anfitriona
La foto de la convocatoria está al final de la entrada.
Os deseo a todos una feliz tarde y un buen fin de semana, besos de flor. 
                                              


                                                   Danzas paganas.

           

            

Ritos y conjuros oscuros.

Cantan dos jóvenes enamorados.

Junto a una hoguera en un campo santo.

Danzan en una fiesta pagana.

 

¡Ven, ven belcebú!, yo te llamo.

Acude a mi llamada, pobre del el joven ingrato. 

Te espero, con esta danza pagana te damos la bienvenida.

 

El crepitar de la hoguera, el seductor color del fuego

Hipnótico, a los jóvenes encandila rojos naranjas y azules.

Un espectro de Belcebú se les apareció.

 

— ¡Quién me llama en esta noche tan especial!  — Dijo Belcebú.

 

— Nosotros, dijeron los dos jóvenes.

Queremos ver el verdadero infierno, todo es mentira y nada es verdad.

Dicen las leyendas urbanas que si cantas y bailas.

Llamando a Satanás, este por alguna esquina aparecerá.

 

 — ¡Así que queréis ver el verdadero infierno!

Pues sabed, que si lo veis no volveréis,

Vagaréis como almas malditas hasta la eternidad.

 

—No lo creo,  —dijo el joven riendo escandalosamente.

¿Tú te lo crees?  —Le dijo a su joven amada. 

— ¡No! mientras ella reía.

 

—Os propongo un juego, si de aquí a media noche no encontráis al enterrador por aquí, vosotros os quedaréis conmigo para siempre, y si aparece os dejare libres, ¿Qué os parece? 

 

¡Bien!  —dijeron los jóvenes temerarios. 

 

Eran las diez, y la gente empezó a venir al campo santo a ofrecer flores y velas, a sus seres queridos.

Muchos venían disfrazados, Drácula, curas y monjas, leñadores, hombres lobos, brujas, muertos vivientes, enanos y princesas.

 

El tiempo se les agotaba, y los jóvenes nerviosos estaban.

Cuando el reloj de la iglesia toco las campanas anunciando que ya eran las 12.

La hora de las brujas.

 

Cuando de pronto de una tumba, la tapa salto por los aires.

Una potente luz salió del interior de ella, roja con un fuerte olor azufré.

Cuando un Grito gutural llamaba a los dos jóvenes.

Salió volando con un gran tridente, ensarto a ambos jóvenes.

Y se los llevó al infierno.

 

Desde ese día, vagan como alma en pena sin poder salir del infierno, sus cuerpos descompuestos con gusanos y larvas poco a poco se los  van comiendo.

Ya no tiene carne, solo tienen piel y huesos, sus ojos están vueltos y de sus bocas sucias la lengua putrefacta juega con un escarabajo pelotero, como otros muchos que osaron y retaron a Belcebú. 

 

Ritos y conjuros oscuros.

Junto a una hoguera en un campo santo.

Danzan en una fiesta pagana.

Así que no juguéis el día de muertos

Porque nunca se sabe quién ha de venir.

 

                                        Fin.

 

                                       

                                                    Si queréis leer más relatos de Terror pinchad Aquí.