Pido perdón
El hombre despertó al tercer día, en la loma de un monte, poco a poco fue abriendo los ojos, para que estos se aclimatasen a la luz de aquel día.
En una húmeda mañana del mes de abril, con un gran dolor de cabeza, tenía la boca muy seca y sus labios estaban cuarteados y resecos, su garganta estaba áspera, le daba fuertes punzadas cada vez que intentaba tragar un poco de saliva.
Donde él estaba, había una cruz vacía a cada lado, levanto la vista y vio a un pequeño montón de gente mirando y murmurando, cuando una mujer de pelo cano se arrodilló a sus pies, y con un poco de agua que llevaba en un cántaro, saco de uno de sus bolsillos un pañuelo blanco, lo mojo y le lavo los pies llenos de Sangre.
Esta lo miró con lágrimas en los ojos, mientras rezaba un avemaría.
—No llores mujer, —le dijo el hombre—
—El daño ya está hecho.
«En dos mil años, veo que todo sigue igual, que la humanidad no ha aprendido nada, de lo que se les dijo, como bien dice el dicho, el hombre es el único animal, que tropieza en la misma piedra.
Sigue habiendo mucha maldad en el mundo, al igual que la desigualdad, sigue habiendo corrupción en todos los ámbitos y en todo el mundo, no son fieles a los que se les dijo que tendrían que cumplir si querían salvarse, pero veo que este mundo está corrompido y está todo perdido, y la humanidad no hace nada por cambiar.
Padre, perdóname, por lo que te voy a decir, por una vez en dos mil años, no te voy a obedecer, voy a ser ese hijo rebelde que se rebela ante ti.
Padre, búscate a otro fiel siervo, por qué yo me cansé de poner la otra mejilla y ser yo el sacrificado, para una humanidad que no está preparada para recibir lo que les viene encima.»
Con mucho cuidado, su mano hizo palanca y atravesó el gran clavo oxidado que aprisionaba su mano, y acto seguido se quitó la corona de espinas que llevaba incrustada en la cabeza, de la cual se quedaron adheridas trozos de piel y cabellos ensangrentados, una vez que se liberó de los clavos de los pies, con un poco de esfuerzo bajo de la cruz, y se fue caminando descalzo hacía un nuevo lugar
Desconocido para todo el mundo.
Fin.
¿Qué pensaríais, si Jesús de Nazaret, renegase de su padre y mucho menos se opusiese a sacrificarse por la humanidad?
PD; He escrito este micro, porque todos los años por Semana Santa me surgen estas pequeñas reflexiones, espero no herir a nadie con este micro, ya que soy la primera creyente y posible pecadora por no ser practicante, puesto que para hablar con él no hace falta ir a su casa, cualquier lugar es bueno (Siempre que no sea un lugar de mala fama y reputación) para rezar y pedirle ayuda.
Ya que estamos pidiendo perdón , yo también lo pido, por mis ausencias y el no prodigarme mucho por aquí , pero tengo otras muchas cosas que no atiendo como debiese , y eso no esta bien ni para mi , ni para el de allá riba.
Os deseo una feliz mañana de Miércoles , y en cuanto tenga un poquito de tiempo para mi , lo empleare para veros a todos vosotros , espero que sepáis perdonarme , besos de vuestra amiga que os quiere flor.